Dudas de que la ‘tasa Google’ pueda recaudar 600 millones para pagar las pensiones en 2018.
La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) duda que el impuesto digital consiga recaudar 600 millones en 2018, poniendo en tela de juicio las estimaciones del Gobierno, que espera conseguir con dicho tributo parte de los ingresos que permitirían financiar los 1.500 millones de euros que supondría la subida del 1,6% de las pensiones. Así lo señaló el director de coyuntura de Funcas, Raymond Torres, quien aseguró que «me cuesta mucho ver cómo se llega a una recaudación de casi la mitad del aumento de las pensiones mediante esta tasa».
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del pasado viernes 27 de abril, el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, cifró en 1.500 millones de euros el coste adicional de la subida de pensiones pactada con el PNV para que se incrementen un 1,6% en 2018, tomando como referencia el IPC.
El ministro afirmó que esta subida «es perfectamente factible» y explicó que se financiaría gracias a la subida por parte de las agencias de ‘rating’ de la calificación de la deuda española, lo que reduce los costes de los intereses; a un menor coste del esperado inicialmente sobre las sentencias de la Responsabilidad Patrimonial de las Administraciones (RPA) respecto a las autopistas; y a los ingresos que supondría la implantación de un impuesto a las empresas digitales, que cifran en 600 millones para 2018.
«Dudo mucho que consiguiera 600 millones de euros este año», asegura Torres, quien considera que «esto puede ser algo a largo plazo si hay una armonización europea de la fiscalidad de las tecnológicas, que es algo que no sé si puede hacer de forma aislada un sólo país, lo veo complicado». Torres considera que la parte de la recaudación de este impuesto a nivel europeo que correspondería a España «son apenas unas decenas de millones de euros, lo que parece muy insuficiente para cubrir el coste adicional de la subida de las pensiones de 1.500 millones».
Por ello, el director de coyuntura de Funcas señala que «sería más importante asegurarse de que las empresas en general pagan sus impuestos» y destaca la importancia de una armonización de las bases fiscales. «Es algo muy deseable, no un impuesto específico a las tecnológicas, sino la armonización de la fiscalidad y la lucha contra la evasión», asegura.
Según Torres, los 1.500 millones adicionales para la subida de las pensiones en 2018 y los casi 2.000 millones que estima Funcas para el rescate de las autopistas de peaje, supondrían que el déficit público en 2018 ascendiera al 2,6%, cuatro décimas por encima del objetivo establecido y tres más que su previsión inicial al analizar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2018.
En cuanto al menor coste de los intereses de la deuda, Torres contradice al ministro de Hacienda al explicar que en la previsión inicial de Funcas, que estimaba un déficit del 2,3%, una décima peor que el objetivo marcado por el Gobierno, «ya estaba incorporada una reducción de los tipos efectivos de interés sobre la deuda pública». Sobre este punto, Funcas estima que los tipos efectivos se reducirán en dos décimas respecto a 2017.
En este sentido, señala que «hasta ahora el factor reducción de la prima de riesgo fue más importante que el factor aumento de los tipos de interés internacional, y llegará un momento que esto se va a acabar, sin contar que en 2019 aumentarán los tipos; pero para este año tenemos una hipótesis bastante favorable que es realista y que no hace falta revisar».
(El País, 06-05-2018)