La falta de mano de obra y el aumento de los salarios en Europa Central están impulsando al alza la inflación.
La falta de mano de obra y el aumento de los salarios en Europa Central están impulsando al alza la inflación, lo que ha provocado un endurecimiento de la política monetaria de algunos bancos centrales de la región tras años de flexibilización monetaria. El banco central checo ya decidió una primera ligera subida de los tipos de interés en agosto y los mercados esperan un nuevo aumento de los tipos el próximo mes, con la tasa de desempleo en su mínimo récord del 3,8 por ciento y la inflación creciendo a su ritmo más elevado en cinco años. Los bancos centrales polacos y rumanos podrían comenzar a subir los tipos de interés el próximo año. Hungría aumentó su salario mínimo en un 15 por ciento en enero, y lo elevará nuevamente en un 8 por ciento en 2018, con subidas del 25 por ciento y 12 por ciento, respectivamente, para los trabajadores calificados. En otros lugares de la región, los salarios brutos checos aumentaron un 7,6 por ciento en el segundo trimestre, la mayor subida desde comienzos de 2008, mientras que los salarios netos rumanos aumentaron un 13,9 por ciento interanual en agosto. S/D.