La situación de las mujeres en el mundo laboral apenas mejora.
La situación de las mujeres en el mundo laboral apenas mejora
Poco a poco las mujeres españolas van ganando terreno en la sociedad gracias a un considerable esfuerzo personal. El interés por estudiar más allá de lo obligatorio, la capacidad de emprender creando nuevas empresas o registrando patentes ha colocado a las mujeres españolas a la cabeza de sus congéneres mundiales solo superadas por las portuguesas. Ese considerable esfuerzo personal ha tenido una pequeña recompensa.
En algo más de una década, España ha conseguido avanzar un puesto y colocarse en el octavo lugar del ranking global de liderazgo femenino del IESE-Women in Leadership, aunque apenas consigue el puesto 25 en liderazgo empresarial.
Estos son los resultados de un estudio dirigido por las profesoras del IESE Nuria Chinchilla, titular de la Cátedra Mujer y Liderazgo, y Esther Jiménez, también decana de la Universitat Internacional de Catalunya (UIC). En él se ha analizado la posición de las mujeres en cuatro dimensiones: personal, política, empresarial y social, a partir de diecisiete indicadores en 34 países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), comparando la situación actual con la que existía en 2006.
Como suele ocurrir cuando se analiza el papel de la mujer en la sociedad, la referencia continúa liderada por los países nórdicos. Suecia, Islandia y Noruega copan el pódium. Le siguen con el cuarto y el quinto puesto, Eslovenia y Francia respectivamente. Estos dos también son los países en los que el liderazgo femenino más ha avanzado en la última década. Tras ellos están, Finlandia (6), Portugal (7), España (8), Bélgica (9) y Reino Unido (10).
A la cola, es decir, los países con menor liderazgo femenino de los 34 de OCDE analizados son Turquía, Japón y Corea del Sur. Aunque donde la situación se ha deteriorado más ha sido en Hungría que pierde 10 puestos respecto a su posición en 2006, Nueva Zelanda que pierde 9 y Austria donde el retroceso de liderazgo de las mujeres le ha hecho bajar 8 puestos en el ranking.
Las mujeres españolas ocupan la mejor posición, el segundo puesto, cuando se analiza el liderazgo personal que tiene en cuenta el acceso a la educación, la formación superior el número de mujeres inventoras y el de empresarias.
También consiguen una buena posición en cuanto a liderazgo político. España es el séptimo país con mayor número de mujeres en el Parlamento o liderando ministerios. Por delante están los países nórdicos y Eslovenia. Pero todavía queda mucho camino por recorrer en el ámbito empresarial y social donde la posición de las mujeres españolas desciende hasta los puestos 25 y 29 respectivamente.
Es decir, el número de mujeres en los Consejos de Administración, las tasas de trabajo parcial involuntario o el desempleo femenino están todavía muy lejos de los que tiene las noruegas, suecas e irlandesas que copan el pódium en este ámbito. A nivel global, el informe I-WIL señala el estancamiento en el número de mujeres managers, que apenas ha crecido una décima en la última década (del 4,4% en 2006 al 4,5% en 2018) y el persistente desequilibrio entre hombres y mujeres.
El liderazgo social, en el que España obtiene la peor puntuación, es el que analiza el apoyo que reciben las mujeres y el impacto de las barreras que encuentran para integrar su vida personal, familiar y laboral, utilizando indicadores como la edad a la que tienen su primer hijo, la duración de la baja de maternidad y paternidad, o la tasa de escolarización de los niños de 3 a 5 años. En este aspecto, la mejor posición la ocupan Israel, Reino Unido y Francia.
(Cinco Días, 10-05-2018)